Conociendo los síntomas de la esclerosis múltiple

La esclerosis múltiple es una enfermedad que ataca al sistema nervioso central (cerebro y médula espinal), provocando discapacidades.

Los síntomas que se presentan con esta enfermedad pueden variar dependiendo de cada paciente y de la zona en la que se ubique la afección. Se conocen casos de personas con síntomas de esclerosis múltiple que pierden la capacidad total o parcial de caminar.

Es importante saber que esta enfermedad no tiene cura, pero que existen tratamientos que pueden mejorar las crisis que se presentan, controlando los síntomas y cambiando el curso de la enfermedad.

Como comentamos antes, es una enfermedad que ataca al sistema inmune, en específico a la mielina que recubre las fibras nerviosas que comunican al cerebro con el resto del cuerpo. Al suceder esto, se presentan daños permanentes o deterioros en las fibras nerviosas.

Síntomas de la esclerosis múltiple

Los síntomas de la esclerosis múltiple son muchos, pero los más notorios o principales son los que vamos a nombrar a continuación:

Problemas de visión

Perder la visión a medida que envejecemos es normal, pero, este también es uno de los síntomas más comunes de la esclerosis múltiple, por lo que se debe prestar atención si está acompañado de otros síntomas.

Se presenta porque el nervio óptico se inflama y altera la visión central. La persona comienza a ver de forma borrosa, doble o en el peor de los casos, pierde la visión.

Este es un problema que se va presentando de a poco, por eso es probable que no se perciba de inmediato, este síntoma se combina en ocasiones, con dolor al mirar de lado o arriba.

Dolores y espasmos

En la esclerosis múltiple se presentan espasmos involuntarios o dolores crónicos, este es un síntoma que puede afectar al 20 o 60% de la población con esta enfermedad.

Al realizar algunos movimientos, la persona puede sentir rigidez en articulaciones o músculos, (síntomas que aparecen en personas mayores debido a la edad), que al querer moverlos pueden reflejar dolor. Es normal sentir este tipo de molestias en la espalda o las piernas.

Entumecimiento y cosquilleo

Estos son los síntomas principales de la esclerosis. Se sienten con más intensidad en los brazos, piernas y dedos. Al ser una enfermedad que afecta a los nervios que están ubicados en la médula espinal y el cerebro, las señales que envían se pueden confundir y crear una especie de cortocircuito que se vuelven conflictivas y dan como resultado el entumecimiento.

Debilidad y fatiga

La fatiga crónica aparece al deteriorarse los nervios de la médula espinal, lo que ocurre durante las primeras fases de la esclerosis múltiple.

Esta fatiga aparece sin aviso previo y pasadas algunas semanas puede mejorar, un síntoma común es la debilidad en las piernas.

Cambios de humor

Las personas que tienen esclerosis múltiple suelen presentar síntomas de depresión, ansiedad, irritabilidad y cambios de humor muy marcados. Se puede pasar de la risa al llanto intenso e incontrolable, lo que se conoce como “labilidad emocional”.

Este síntoma puede afectar seriamente las relaciones familiares, de pareja o laborales, lo que hace que trabajar en la salud mental y compresión de la enfermedad de estos pacientes y su entorno, sean claves para convivir mejor con la enfermedad

Pérdida del equilibrio y mareos

La pérdida del equilibrio y la coordinación son otros síntomas característicos de esta enfermedad lo que conlleva a la disminución de la movilidad y problemas para caminar.

A medida que la enfermedad avanza, los mareos y el aturdimiento se hacen más intensos, pero como decíamos al principio de este artículo, en la actualidad existen tratamientos que ayudan a paliar los síntomas, junto con la rehabilitación y la fisioterapia.

Disfunción sexual

El deseo sexual y las erecciones pueden verse afectados por esta enfermedad, lo que puede provocar problemas a nivel de pareja. Por eso es tan importante la comprensión de la enfermedad por parte del entorno de quien la padece, y ser consciente de cómo poder afrontarla.

Afecciones cognitivas

La mayor parte de las personas con esclerosis múltiple presentan síntomas de problemas cognitivos como: pérdida de la memoria, de atención, problemas para hablar, para organizarse, emocionales o depresiones fuertes.

Mal funcionamiento de la vejiga y los intestinos

Puede ser que las personas mayores tengan problemas de incontinencia urinaria, debido a la pérdida de fuerza en los músculos en la zona, pero son síntomas que se pueden tratar sin mayores problemas.

Con menos frecuencia, se puede sentir estreñimiento, diarreas o imposibilidad de controlar los intestinos.

¿La esclerosis múltiple es hereditaria?

Aunque la genética puede ser un factor de riesgo, no es el único que se requiere para padecer la enfermedad. Aunque existe una probabilidad de presentar síntomas si se tiene un familiar cercano, no es seguro que se padezca.

Factores de riesgo

No se sabe con exactitud cuál es la causa de esta enfermedad, pero existen factores genéticos y ambientales que pueden dar paso a ella, se cree que puede existir un factor infeccioso que afecta al sistema inmune y produce que los vasos de la pared intracerebral se alteren, ocasionando los síntomas.

La edad es considerada un factor de riesgo, ya que los síntomas pueden presentarse entre los 20 y los 40 años, aunque se pueden ver síntomas en personas mayores o algunas que no tengan este rango de edad.

Es muy probable que la enfermedad se manifieste mucho más en el sexo femenino que en los hombres y las personas de raza blanca con ascendencia europea están más predispuestas a sufrirla; por otra parte, los indígenas, asiáticos y africanos son menos propensos.

En el caso de existir antecedentes familiares con esclerosis múltiple (padres o hermanos), como se mencionó antes, existen más probabilidades, aunque no es un factor determinante.

Se han encontrado más personas con esta enfermedad en climas fríos, como Estados Unidos, Canadá, Europa y Nueva Zelanda, por lo que se piensa que los habitantes de países fríos son más propensos.

Los pacientes que han sufrido enfermedades autoinmunes como diabetes tipo 1, anemia perniciosa, enfermedades intestinales inflamatorias o psoriasis, también pueden tener mayor riesgo.

Tratamiento de la esclerosis múltiple

La esclerosis múltiple no tiene cura, pero se pueden aplicar tratamientos para aminorar los síntomas. Uno de ellos es el uso de corticoides en épocas de brotes, es decir, recaídas, exacerbaciones o episodios de síntomas fuertes.

Los corticoides son una buena opción para mejorar los síntomas, en cuanto a duración y gravedad.

Existen también tratamientos farmacológicos que ayudan a aminorar los síntomas de movimientos involuntarios, dolores o problemas psiquiátricos.

Conclusión

Los síntomas de la esclerosis múltiple pueden ser variados, por lo que pueden confundirse con otros, por eso es muy importante estar atento a cualquier eventualidad que no mejore, y visitar a un especialista.

El control a tiempo hará que los síntomas se manejen de mejor forma y se controlen a tiempo, practicar ejercicios de relajación y respiración también será de gran ayuda.